IMÁGENES Y SONIDOS DE LOS JAIME VILLASEÑOR 022 Aldara Arquitecta

Aunque algunas personas piensan que el nombre Aldara es árabe, princesa; la mayoría de la literatura ubica este nombre como gallego, como lo acredita que así se llamaba la madre de San Rosendo de Orense.

El nombre es de origen germánico, de hild guerrero y ward sabio, es decir, significa fuerza, guerrera sabia, sus diminutivos son Ilduara o Eldara.

Todos recordamos a nuestra sobrina Aldara como una magnífica basquetbolista, pero ahora ha anotado la mejor canasta de su vida y ayer concluyó sus estudios profesionales, generación 2003-2007, graduándose de Licenciada en Arquitectura, por la Universidad Nacional Autónoma de México. De inmediato procedemos a enviarle un goya monumental.

La celebración, este viernes 3 de agosto, inició con gran solemnidad, en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, situada en el Centro Histórico, con una ceremonia religiosa de acción de gracias, culminando con gran boato y elegancia, en el bellísimo Ex-Convento de San Hipólito, escenario en donde convergen historia y belleza arquitectónica, erigido a partir de 1520 por Juan Garrido, como Ermita de los Mártires y declarado en 1964 Monumento Colonial por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.

Aldara estuvo acompañada por sus más cercanos afectos: Su mamá Paty, que con mucha razón irradiaba orgullo y satisfacción, Mario su padre, feliz por este hecho tan trascendental y por oír una voz infantil que le decía buelo: su nieta Isabel, nacida en San Diego y su otra nieta Daniela.

Claro que la acompañaron sus hermanos, Margarita que se desplazó desde Tijuana, Juan Pablo que tomará este buen ejemplo académico y Ricardo acompañado de su esposa.

No podían faltar su novio y sus amigas entrañables; también estaban sus tías Doris y Rosita Villaseñor (Cucú); Mamá Tete, su abuela paterna, la fugaz estancia del tío Memo y Humberto (Papábeto) su tío paterno.

La nueva Arquitecta recibió un diploma de las autoridades escolares, brindó con sus compañeros y bailó durante toda la noche, con la música de una orquesta en vivo, compartiendo los jóvenes egresados con los de la tercera edad, que regamos polilla en toda la pista.

Desde aquí le enviamos una gran felicitación y deseamos que su futuro sea de lo mejor con grandes éxitos profesionales y que su vida encuentre el camino permanente de la felicidad, como bien se lo merece.