Janet Piña Jaime, mi nieta mayor, no solo hace muchas cosas, sino que las hace bien. Tiene gran iniciativa y afortunadamente el talento suficiente para coronar con éxito sus proyectos.
En actividades escolares es sobresaliente, sobre todo en inglés, así lo reconocen sus compañeras de clases y (las mamás) que la llaman frecuentemente para que les explique la tarea.
Deportivamente practica la gimnasia, juega ajedréz, es nadadora y patina sobre hielo; artísticamente toca el piano, canta, dirige, actúa y desde que tenía un año es dibujante; literariamente hace guiones y escribe cuentos, incluso ganó un concurso de narrativa en su escuela; empresarialmente elabora artesanías y vende collares y como organizadora promueve eventos de bienvenida, cumpleaños y despedidas. Ya en El Salvador, con motivo de mi cumpleaños, hace dos años, concertó con los meseros para que me llevaran un pastel.
Ejerce liderazgo entre su grupo familiar y escolar y últimamente ha demostrado que es muy buen abogada, pues no hay situación que le parezca injusta en la que ella en automático, se convierta en defensora de las causas difíciles.
Janet siente un gran cariño por los animales, muy particularmente por los perros, que son su adoración, por eso se debate entre ser algún día veterinaria, entrenadora de delfines o criadora de animales.
Por eso y mucho más, Cucú le hizo en 2005, un pensamiento que refleja lo dicho anteriormente por mí:
JANET SUPERSTAR
Eres luz, eres sol,
nuestro mundo iluminas
con tu intenso resplandor.
Eres tierna, eres bella
y del firmamento
la más grande estrella.
Tus manitas de alabastro,
cadenciosa y delicadamente
mueves, interpretando así
las más bellas melodías,
primorosa Blanca Nieves.
Deslizas sobre el hielo tu figura
para estampar en la pista mil
tatuajes, de repente te
transformas en sirena,
o si lo quieres puedes ser,
Juana de Asbaje.
Eres poeta, compositora,
dibujante, cantante,
cuantas facetas de tu vida
puedes recorrer en un instante.
Hay que verlo para poderlo creer,
múltiples hadas madrinas
te super dotaron al nacer
Son tantos los atributos
que la vida te brindó,
que no nos cabe el orgullo
en el cuerpo y gracias le
damos a Dios.
Que la virtud y nobleza te
acompañen en tu recorrer,
para poder ser una niña
muy grande, mi pequeña y
adorada Janet.
Cucú
San Salvador, Julio de 2005
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