Nueva Gales del Sur (en inglés, New South Wales, abreviado como NSW) es uno de los seis estados que conforman la Mancomunidad de Australia. Conocido como el “primer Estado” o el “Estado Principal”, está ubicado al sureste del país; Con 809,444Km2 es el quinto en extensión territorial de Australia, un poco más grande que Mozambique, Paquistán y Turquía, pero más pequeño que Namibia y Venezuela. No obstante es el estado más poblado de Australia, con casi ocho millones de neosurgaleses, gentilicio de sus habitantes. Fue fundado en 1778 y originalmente incluyó buena parte de la tierra de Australia, Nueva Zelanda y otras islas de la región. Sin embargo, durante el siglo XIX, se separaron varios territorios de este estado, formando las colonias británicas de Tasmania, Australia Meridional, Victoria, Queensland y Nueva Zelanda.
El animal emblemático de Nueva Gales del Sur es el ornitorrinco, un pequeño marsupial; y la flor emblemática del estado, la “waratah”, Telopea especiosa, que se da en grandes arbustos o pequeños árboles de las protecea nativas.
Nueva Gales del Sur es conocida por Port Jackson, que es el puerto más importante, y por su capital Sídney, la ciudad más poblada del estado y del país, donde viven aproximadamente dos tercios de la población total del estado.
La Ciudad Oceánica más grande, más antigua y más poblada de Australia y Oceanía es Sídney-Sydney en inglés-en las márgenes de la amplia Bahía de Jackson, La Bahía de Sídney, el mayor puerto natural del mundo, junto con el aeropuerto Kingsford Smith, son la puerta de entrada al país, y al mismo tiempo, la ciudad es el centro financiero y corporativo.
Fue el asentamiento de la primera colonia penitenciaria británica, fundada el 26 de enero de 1788, cuando llegó la primera flota de convictos traídos desde Gran Bretaña, y actualmente, además de liderar el top 10 de las ciudades con mejor calidad de vida del orbe, es una de las ciudades más multiculturales del mundo, y se refleja en su rol de principal destino para inmigrantes de Australia, sobre todo asiáticos y árabes.
El turismo se ha convertido en una extraordinaria fuente de ingresos y de crecimiento, siendo catalogada como una de las 15 ciudades más visitadas del mundo, por turistas satisfechos, entre otras cosas, por su abundante y eficiente capacidad hotelera.
Es un auténtico paraíso en la tierra, lástima que se encuentre tan lejos, casi de todo el mundo, aunque eso también tiene sus ventajas, porque se convierte en un destino más exotico en donde uno difruta intensamente esa onerosa visita excepcional. Sídney es sencillamente inolvidable.
Con una población en su área metropolitana cercana a los 4.5 millones de habitantes, que son llamados sydneysiders (no existe gentilicio en español universalmente aceptado), la mayoría tienen antepasados británicos e irlandeses, solo 2% se identifica como de origen indígena.
Sìdney es la entidad más populosa de Australia, sobresaliendo su industrialización y urbanismo, sus servicios aparecen entre los mejores del mundo. El clima es cálido y templado, soleado casi todo el año. En general los inviernos son moderadamente fríos.
Si tu lectura ha llegado hasta aquí ya debes tener claro lo de neosurgaleses y sydneysiders, ahora entenderás lo de Straya.
El inglés australiano es diferente del inglés británico y del estadounidense, ya que tiene un sesgo hacia la invención, el engaño, la blasfemia, el humor y una sociedad son clases. La historia del idioma australiano, desde 1778 hasta la actualidad, es en realidad la historia de la nación australiana, el acento australiano surgió tras la llegada de los colonos europeos, todos hablaban de manera diferente y usaban diferentes palabras, creando la necesidad para poder comunicarse entre sí, de nivelar sus variaciones dialectales.
Reducir las palabras se ha convertido en una característica única de los australianos durante más de tres siglos, por lo que surgió el Aussie Lingo, que es su jerga o slang, que tiene palabras y frases que tan sólo existen y tienen significado ahí. El slang australiano es la jerga informal, sigue siendo inglés, pero son palabras propias que sólo se utilizan, para ahorrar letras y acortar las palabras, por los Aussie (Australianos), pronunciado ozzie. A su país al que le dicen simplemente Oz (el sobrenombre cariñoso e irónico de Australia), también le dicen Straya (en británico, un sustantivo jocoso.
Es importante recordar que una característica clave de los coloquialismos australianos es que nunca son estáticos y con frecuencia cambian el significado o la ortografía con el tiempo.
Acortar las palabras con vocales como “ie”, “a”, o “o” se ha convertido en una característica distintiva del aussie lingo, lo que les permite que sus conversaciones sean menos formales y estrictas.
Por ejemplo “ie”, el origen de la palabra “selfie” se encuentra en Australia, se le ocurrió a un estudiante universitario australiano al publicar y comentar una foto de su fiesta de cumpleaños, y de ahí recorrió el mundo entero. Terminación “a” Macca’s, hace referencia a McDonald’s,al grado que la compañía de comida rápida adaptó su nombre al aussie lingo, además de ser la segunda palabra más usada en jerga australiana.
Las abreviaciones de la jerga ayudan a que las conversaciones suenen más familiares y amigables. No hay ningún australiano que no haya usado jerga al menos una vez en su vida.
Una curiosidad el Burger King allí se llama Hungry Jack’s”, no es por la jerga, sino porque ese nombre ya estaba registrado antes que llegara la transacional de comida rápida.
La ciudad posee muchas atracciones, destacando sin duda, la famosa Casa de la Ópera de Sídney (Sydney Opera House), símbolo incuestionable de la ciudad de Sídney e incluso de todo el estado australiano, una de las obras más notables de la arquitectura contemporánea y emblema cultural del SXX
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Una linda quinceañera frente la Ópera de Sídney. |
En 1955 el Primer Ministro de Nueva Gales del Sur aprobó la idea de tener una magna edificación en donde se realizaran obras de teatro, producciones musicales, funciones de ballet y presentaciones de ópera, eligiendo, para dicho efecto, la península de Bennelong, en la bahía de Sídney, justo donde se encontraba el fuerte Macquarie.
Se convocó a un concurso internacional, con premio de 100,000 dólares australianos, que inició el 13 de septiembre de 1955, recibiendo 233 proyectos de 32 países diferentes. El diseño ganador, por su belleza y extraordinaria forma, anunciado el 30 de Enero de 1957, fue para el magnífico Arquitecto danés, de 38 años, Jørn Utzon, iniciándose la construcción el 2 de marzo de 1959, pero esta obra solo pudo ser inaugurada hasta catorce años después, por conflictos de presupuesto y calendario.
En el verano de 1957, Utzon visita Sídney por primera vez para comenzar el trabajo en firme, le esperan nueve años de duro trabajo. Aparentemente, todo estaba en contra del proyecto ganador, incluso no había presentado un proyecto completo, sino simplemente un conjunto de cuadernos con bocetos y dibujos a mano.
De la estimación preliminar de tres millones y medio, el costo había llegado a más de 100 millones de dólares australianos. Desde el primer momento resulta evidente para todos que el proyecto original es sencillamente imposible de construir. Las gráciles cáscaras de hormigón que se ven en los dibujos presentados al concurso no se sostendrían.
Surgen problemas, como no saber como construir la cubierta, que se reflejan en el retraso de las obras. Durante cuatro años el equipo de ingenieros y el diseñador tratan de trasladar los dibujos del arquitecto a la realidad. Finalmente en la primavera de 1961 Utzon ha descubierto la solución perfecta para la cubierta, en lugar de complejas formas parabólicas, ha recurrido a la esfera, la idea es que todos los segmentos derivan de una misma esfera virtual de 75 metros de radio.
Con la parte más difícil del proyecto resuelta, se muda a Australia en 1963, durante todo el proceso de construcción, las críticas a Utzon por los retrasos y el elevado costo de la obra no habían parado, por si fuera poco en mayo de 1965, una coalición de partidos conservadores ganan las elecciones, acabando con los gobiernos laboristas y con el apoyo gubernamental al arquitecto, quien es acosado por el nuevo ministro de Obras Públicas acabando con su autonomía, hasta que Utzon dimite y se va de Sídney el 28 de abril de 1966, para nunca jamás regresar. Inmediatamente llegan reacciones de todo el mundo, incluso los estudiantes de arquitectura de Australia se declaran en huelga.
Finalmente con ayuda de una constructora inglesa, por fin se inaugura la obra el 20 de octubre de 1973, con una estructura orgánica muy famosa en forma de velas con azulejos blancos, con cinco teatros, cinco estudios de ensayo, dos salas principales, cuatro restaurantes, seis bares y numerosas tiendas de recuerdos.
Desde entonces, se ha convertido en la principal atracción turística de Australia, declarado Patrimonio de la Humanidad en 2007 y en una de las 21 nuevas maravillas del mundo; además muy rentable.
Utzon recibió numerosos premios y condecoraciones durante su vida, pero ninguno tan importante, como el Premio Pritzker, considerado el "premio Nobel" de la arquitectura, que le fue concedido en 2003. Jørn Utzon murió en la misma ciudad que nació, Copenhague el 28 de noviembre de 2008, a los 90 años de edad, sin haber estado nunca presente frente a su monumental obra.
Otro ícono de esta ciudad es el Puente de la Bahía de Sídney, que es conocido originalmente como Sydney Harbour Bridge, es un puente de arco, de 134 metros desde su parte más alta hasta el nivel del agua, y en su parte más baja 18 metros, siendo en su momento el primer puente de arco de todo el mundo, y uno de los símbolos más reconocibles de Australia.
El puente atraviesa la Bahía de Sídney, conectando el Central Business District (Distrito financiero de Sídney) con la costa norte (North Shore), pudiendo cruzar en tren, bicicleta, automóvil o caminando. Se puede subir por las escaleras mecánicas que hay en ambas orillas, hasta el carril peatonal.
Construido a partir de 1924, se ha convertido en uno de los símbolos no sólo de la ciudad, sino de todo el país, debido a su tamaño, a la ubicación que tiene y al paisaje que forma. Tras ocho años de construcción se abrió al público el 19 de marzo de 1932, con una longitud total de 1140 metros, y 49 metros de anchura.
Es una pieza distintiva del horizonte de Sídney, convertida en el centro de las celebraciones de Año Nuevo, a la vez que uno de los mayores atractivos de la ciudad.
El clima de Sídney es placentero, en especial de marzo a abril y de octubre a noviembre, soleado casi todo el año, no alcanza las temperaturas intensas de calor o de frío y las lluvias no son excesivas, pero en verano puede llegar a los 40° C con excesiva humedad.
En general, los inviernos son moderadamente fríos. La ciudad no se ha visto afectada por ciclones.
A diferencia de otras ciudades del mundo, Sídney no está posicionada a lo largo de una falla tectónica, de tal forma que la zona de Sídney no suele verse afectada por terremotos importantes. La actividad sísmica del país es el resultado de la presión de placas tectónicas que se encuentran lejos del continente, lo que significa que de manera literal cualquier parte de Australia está bajo una amenaza potencial y que los temblores en este país son extremadamente difíciles de predecir.
De los últimos cincuenta movimientos telúrico de Australia, cuya intensidad oscilo entre 2 y 3.6 grados, solo dos se dieron en el área de Sídney (uno de 2.2 y el otro de 2.4 grados Richter). Comparado con el tamaño del país, los terremotos ocurren muy raramente, lo que ha conducido a una falsa sensación de seguridad.
No tiembla, pero Sídney es propensa a fuertes tormentas de granizo y tormentas de viento, que en verano son muy frecuentes en todas las ciudades de Australia, recordando la tormenta de granizo de 1999, muy dañina para Sídney y sus suburbios orientales, que dejó pérdidas de 1.7 mil millones de dólares australianos en menos de cinco horas.
Al embarcarnos, el 21 de diciembre de 2018, el cielo obscureció, el sol se cubrió por una nube intensamente negra y bombardeó la cubierta con enormes piedras de granizo, obligándonos a resguardarnos. Fueron los granizos más grandes que yo he visto, después de casi media hora de intenso golpeteo, en compensación la naturaleza nos dio un hermoso arco iris.
El área urbana de Sídney tiene alrededor de 70 puertos y playas, incluyendo la famosa, concurrida y emblemática Bondi Beach, a solo 10 kilómetros del centro de la ciudad. Se trata de una de las playas más famosas y reconocidas del país en todo el mundo, porque probablemente sea la que más haya aparecido en postales, programas de televisión y películas. Su impresionante playa de arena blanca tiene forma de media luna, cada año, decenas de miles de personas, desde viajeros mochileros a millonarios, caminan, hacen footing o simplemente disfrutan del sol en las arenas doradas de esta amplia playa de ciudad de un kilómetro de largo.
Sus tranquilas y protegidas aguas son también el lugar perfecto para aprender a practicar surf. La calle principal a lo largo de la playa es Campbell Parade. Allí se encuentran diversas y elegantes tiendas de moda y de surf, cafés y bares al aire libre. Es un lugar de encuentro muy popular de la "comunidad de los cafés" de Sídney.Bondi Beach también es sede del Club de guardavidas, creado en 1906, es el club más antiguo de Australia.
El área metropolitana de Sídney está rodeada de parques nacionales que contienen bahías y ríos, alberga cuatro parques nacionales, como parte de los Alpes Australianos. La Región de las Montañas Azules (Blue Mountains, al oeste de Sídney, con antiguas formaciones rocosas, cuevas y reservas de conservación, caracterizada por su abundante fauna nativa, ofrece paisajes incomparables, aunque debo confesar que no los pudimos disfrutar por cuestiones climatológicas, perdiéndonos el trayecto en el Cable Car Katoomba; no obstante gozamos de ver la convivencia en alguno de sus pueblitos, inclusive probamos la carne de canguro.
El distrito financiero a la vez, está rodeado por una cadena de zonas verdes, por ejemplo los Jardines Botánicos Reales (Royal Botanic Garden) que tiene ejemplares de todo el mundo. Asimismo Hyde Park, un parque de tamaño medio, que está en el centro de la ciudad.
The Rocks (Las Rocas), el Barrio Más antiguo de Sídney, a la sombra del
puente de la bahía de Sídney, en donde confluye el pasado y el presente.
Fue en
sus primeros días colonia penitenciaria y hoy, el Barrio más europeo de la
ciudad en un laberinto de casas adosadas y calles adoquinadas a solo cinco
minutos de Circular Quay.
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Sus restaurantes son de buena calidad pero de precio alto. |
Con edificios históricos renovados, Galerías de Restaurantes, cafés y tiendas turísticas donde comí las tradicionales fish and chips.
Darling Harbour (Puerto Darling) es un puerto de la ciudad que se ha
convertido en un sitio turístico popular, se trata de una gran calle peatonal
de recreo, situada en las afueras del oeste del distrito central de negocios de
Sydney, extiende hacia el norte de Chinatown. Cerca puede visitarse el Jardín
Chino y el Sydney Aquarium.
El Aeropuerto Internacional Kingsford Smith o Aeropuerto de Sídney, es la mayor base de Quantas, aeropuerto principal de Australia y catalogado como el vigésimo en la clasificación mundial. Atiende anualmente, en sus tres terminales, a casi cuarenta millones de usuarios, es accesible tanto en automóvil como en tren.
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Australia, país pionero en utilizar el rostro como pasaporte. |
Nosotros accedimos dos veces a
Sídney, un por vía marítima y otra por vía aérea, el aeropuerto nos pareció
majestuoso.
Al abandonar
el país, llegamos al área de check-in y no encontramos a nadie que nos
atendiera, solo veíamos unos aparatos rarísimos que no teníamos la menor idea
de cómo se operaban. Con nuestra cara de what, solicitamos ayuda y supimos
entonces que se trataba de una innovación, implementada en diciembre de 2018, de
la cual Australia es pionera: el sistema Smart Gates para controlar de manera automática el ingreso
de pasajeros, con una prueba de reconocimiento facial a través de escanear el
rostro del viajero de la aerolínea Quantas, para llevar un control electrónicos
de los pasaportes y a la vez la recepción del equipaje.
Quantas utiliza la cara de sus pasajeros como su pase de abordar gracias
a identificadores biométricos que establecen las proporciones
Aunque no mencioné los eucaliptos que están omnipresentes en Australia, ni comente sobre el pastel de carne, plata típicamente Aussie; no puede dejar de mencionar que encontré en ese país el mejor ginger ale de todo el mundo: El Ginger Beer Bundaberg
(cerveza Bundaberg de Jengibre), en botellas de 375 mililitros, es elaborada
por la compañía australiana Bundaberg Brewed Drinks, toma su nombre de una
pequeña población del estado de Queensland, aproximadamente a 385 kilómetros de
la capital Brisbane. La compañía es un orgulloso negocio familiar, de
flamencos, que desde 1960 fundaron y actualmente también administran otras
generaciones de Fleming. Su expansión la
ha llevado a ser de alcance internacional.
Featherdale Wildlife Park es un zoológico australiano de siete acres, en Doonside, al oeste del distrito central de negocios de Sídney. Se especializa en fauna y aves nativas australianas, así como reptiles y marsupiales.
Su apertura tuvo lugar en 1972, por Charles y Marjorie Wigg, en 2005 y 2009 fue premiado como la mayor atracción turística. 80% de los animales exhibidos, como el dingo, koala, demonio de Tasmania, no se pueden encontrar en el resto del mundo.
El ángulo agudo que hace el triángulo de Polinesia corresponde a Rapa Nui (Isla de Pascua), uno de los principales destinos turísticos del país debido a su belleza natural. Por tanto la Isla de Pascua, perteneciente a Chile, está en Oceanía, a “solo” 3754 kilómetros de la Ciudad de Santiago de Chile y ahí terminaron nuestras vacaciones, ya entrados en kilometraje, estábamos muy cerca de la Ciudad de México, apenas 6606 Km.
Muy cansados llegamos al aeropuerto de Santiago y ahí nos esperaba el destacado ingeniero Ariel Soto del Solar, nuestro hijo chileno, que como siempre nos recibió con una amplia sonrisa y nos llevó a la Ciudad de Santiago a comer a un restaurante peruano, a descansar a su confortable departamento y a despedirnos, después de una agradable y breve visita en un café de postres riquísimos.
ARIEL desde aquí
Rosita y yo te mandamos un saludo muy cariñoso en el marco de nuestro eterno
agradecimiento por tu hospitalidad, esperando que además de mucha salud, vivas
plenamente con felicidad. ¡te lo mereces!
Como dijo Marco Polo: "Y eso que no conté todo lo que vi".