17 FRUTAS: Incorporamos frutas que inician con O y P

Como siempre maravillado con los regalos de la naturaleza, ahora quedo sorprendido por sus “caprichos” tales como  producir huevos vegetales, ofrecer besos selváticos o imitar simios en orquídeas tropicales.

Pero Natura va más lejos y ofrece la base estructural para que el hombre pueda crear una flor de singular belleza: la Rosa Osiria o que  la Amazonía Colombiana nos regale una flor también hermosa y a la vez de rareza extrema: La Flor de Inírida.

PLANTA DE HUEVOS

(Solanum ovigerum)

Planta ornamental no comestible, de la familia de las solanaceas, es también conocida como berenjena blanca pues está directamente emparentada con la berenjena negra (Solanum melagena).

Originaria de Asia y África, se ha aclimatado en América, posee hermosas flores de color violeta que aparecen en primavera, tiene hojas anchas y frondosas y se reproduce por semillas.

Esta gallina vegetal, es una planta de exteriores, que fructifica en verano produciendo frutos de tamaño y apariencia de un huevo de gallina. Mantiene sus frutos, que al principio son blancos, después amarillos y finalmente dorados.

FLOR DEL BESO DE MOCOA

(Psychotria elata)

Sugestiva flor, llamada también Labios de Novia o Hot Lips Plant, que recuerda un par de labios pintados a punto de dar un beso.

Habita en zonas selváticas pluviosas, bajo los árboles y a orilla de manantiales y arroyos, es originaria de Colombia y se distribuye por Ecuador, Panamá, Costa Rica y México.

Su nombre se refiere a Mocoa, capital del Departamento del Putumayo en la siempre bella República de Colombia, de donde es nativa.

ORQUÍDEA CON CARA DE MONO

(Dracula simia)

Planta epífita descubierta en 1978 por el botánico Leur que fue quien le puso su nombre, dracula derivada del latín pequeño dragón, por las dos largas espuelas que salen de sus sépalos y simia por la disposición de sus columnas, pétalos y labio, que despiertan la imaginación y la mayoría la ven con cara de mono.

Originaria de la región sureste de Ecuador, se encuentra también en bosques nublados de Perú y Colombia. Florece en cualquier época del año, siendo su fragancia con olor a naranja madura.

ROSA OSIRIA

(Té híbrido rose)

Es un cultivar logrado por W. Kordes 'Söhne de Schlieswig-Holstein, Alemania, la empresa más prestigiosa del mundo en el cultivo y venta de rosas de jardín, fundada en 1887 en Elmshorn con el objetivo de criar variedades resistentes y saludables para el clima alemán. Cada año experimentan mas de 50000 nuevos cruces de rosas de jardín y rosas cortadas que se ponen a prueba, lo que lleva a cuatro o seis variedades comercializables después de un periodo de fitoexperimento de ocho a diez años.

La Rosa Osiria es un híbrido de té con rosas, de fragancia muy perfumada y aspecto sensacional, combinación de colores  con pétalos aterciopelados. Flor llamativa, doble, con pétalos blancos en la parte exterior y bordo color sangre borgoña en el interior.

Es una flor para corte por su elegante porte, tallo erecto y porque permanece varios días en buenas condiciones. Se cultiva en suelos con abundante materia orgánica y con buen drenaje.

FLOR DE INÍRIDA

(Guacamaya superba)

Especie endémica de la sabana del extremo oriental colombiano en donde se intercepta la Amazonía con la Orinoquía, en inmediaciones de los ríos Atabapo e Inírida.

Considerada la flor eterna del Guainía (Uno de los 32 Departamentos de Colombia, es limítrofe con Venezuela) ya que es totalmente emblemática, pues se encuentra en la Bandera de Inírida (Ciudad capital del Departamento del Guainía, en el extremo oriental de Colombia) y en el Escudo del Guanía.

Su belleza dio origen a una leyenda Puinave (Pueblo amerindio que habita en aldeas dispersas en la cuenca del río Inírida), en la que la princesa Densikoira se enterró en los cerros del Mavicure (Conjunto de tres montículos pertenecientes al Macizo guayanés) recogiendo luceros y las estrellas que encontraba a su paso, prometiendo fidelidad eterna al hombre con el que jamás se casaría, porque no era de su clan; convirtiendo estrellas y luceros en flores eternas, que persisten como testimonio de su amor imposible.